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feliz por vos
feliz por mi...
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feliz
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la ventana es mas grande sin tu amor....
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el gato que esta en nuestro cielo
no va a volver acasa si no estas ...,
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no sabes mi amor, que noche bella
mirando tu y yo la misma estrela...
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.el gato que esta triste y azul,
porque en mis ojos... una lagrima hay...
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yo tambien creo que todo lo que necesitamos es amor...
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estoy esperando el mueble para poner en escena mi coleccion de muñes!
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Como diria el gran Nietzsche: la vida sin musica seria un gran error...
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nunca todo esta tan bien o esta tan mal
nunca nos equivocamos mucho o poco, simplemente nos equivocamos
nos arrepentimos.
lloramos.
lloramos de alegria, lloramos de felicidad, lloramos de emocion, lloramos de impotencia.
lloramos la distancia, el olvido, lloramos la injusticia.
lloramos.
segun como se mire, todo depende.
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y a vos querida que decis que mi blog es grasa y aburrido, gracias por pasar a ver que escribo todos los dias....
me ayudas a sentirme viva.
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Gracias mami por darme la fuerza para cerrar este circulo toxico que me estaba ahogando.
Gracias por dejarme ese legado tan hermoso:
yo valgo
yo soy importante
yo no merezco que nadie me haga sufrir
yo voy a ser feliz, porque se que la vida tiene algo bueno preparado para mi.
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Cuando sali del cine, un poco dormida (no por la peli, sino por el agite del dia) me quede con alguna que otra duda...
Al otro dia en el trabajo una amiga me pregunto: ¿pero estaba loco, o no? (por Di Caprio), como generalmente las pelis me dejan dudas y pregunto y pregunto, llego al trabajo con respuestas, lo que hace parecer que soy una gran entendedora de cine, asi que ante la minima pregunta de mi colega, me sentí presionada, como una madre que no quiere dejar a su hija con la angustia de la incertidumbre. Pero como las madres, que no saben qué es la muerte, si el amor dura para siempre o qué es el tiempo, yo no sabía si al final Teddy Daniels(el personaje de Leonardo Di Caprio), estaba loco o no. Me inclinaba a pensar que no, pero igual le dije que no sabía. Ella lo entendió todo porque no preguntó más.
Al otro día, tomando un café con otro amigo (que estudia fotografia y le gusta, ademas de que entiende mucho de cine), me dice muy seguro que sí, obvio que estaba loco. A él no le habían quedado dudas y, aunque había algo tranquilizador en esa seguridad, no pude evitar repasar en voz alta un par de escenas que comprobarían que Teddy Daniels no estaba turuleco, y lo terminé haciendo dudar.
Después leí en una entrevista que Leonardo Di Caprio dice que hay que ver “La isla siniestra” tres veces . Ahí me decidí a no pensar más en el tema.
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Supongo que esa sonrisa se quedó en mi cara cuando salí y me crucé con mi preferido que estaba regando las plantas. Sólo me caían unas lágrimas (quizás eran de felicidad). Levanté la mano y buenos días; adiós, Niña me contestó y lo contagió mi sonrisa como a un espejo.
A los pocos pasos: ch, ch, ch, ¡Niña! Frené en seco, giré y me acerqué sin rarezas, como los chicos se acercan a sus familiares. ¡Ahí está! y apuntándome con un dedo me agrandó los ojos. Parecía alguien que acaba de descubrir un truco de magia: ¡Ahí está! ¿Ahí está, qué?, pensé y él me contestó al instante: Ahí está la sonrisa que quería conocer.
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No voy a pisar el freno, no voy a ser yo
