Ayer, llorando un poquito con mi hermana, decidí que voy a meter algunas personas, momentos y recuerdos en una caja, cerrarla bien para que no escapen y vuelvan a mi vida y luego enterrarla… o porque no quemarla??
Entre las cosas y personas irían:
Algunas compañeras de la secundaria (sobre todo dos, una grandota y morocha y otra medio tarada).
Leo (mi primer novio y mi primer desilusión).
Leonardo (otro novio, que la verdad… si la mierda tuviera otro nombre se llamaría así, y uno diría ¿Por qué no te vas a Leonardo!?).
Maria Tamashiro, Débora, Vanesa y todas las villeras amigas suyas de Podestá.
Las tristezas y la angustia que me produjo ser “la nueva” cuando me cambiaron de colegio.
Los quilos que engorde (y por suerte baje!!!!) después de las angustias.
La enfermedad de mi hermana.
La tristeza que me produce tener a mi mamá de esta forma y no como era antes.
Juan.
El trabajo en Comunicaciones del Sol, que me hizo perder MUCHAS cosas en la vida.
Daniela y Vanesa las víboras de la oficina de San Martín 336.
La capacitación del 112.
La materia Arte y Educación.
Las personas, que me hicieron daño (y son muchas).
Las veces que yo lastime a alguien (perdón…tal vez no lo merecían… y así lo hubiesen, no soy quien).
El hospital Pena.
Y muuuchos momentos y cosas y personas mas….
Y deben faltar, por eso la caja aun queda abieta…
