lunes, 28 de julio de 2008

solo


Este viernes, me fui con luli a la trastienda a ver la presentacion de lo último de Cabezones “Solo” y está enmarcado en la disolución del grupo.
No hace falta analizar demasiado para darse cuenta que “Solo” es el álbum solista, valga la redundancia, de Cesar Andino, todavía bajo el yugo de Cabezones, la banda con la que grabó una decena de discos, ahora ya sin tres de sus integrantes principales, aunque de todas formas la discográfica no autorizó a que bautice a este nuevo proyecto con nombre propio y por eso la historia cabezona continúa desandándose de una manera bastante extraña. De aquella agrupación sólo sobreviven Andino y el baterista Alejandro Collados, productor de lo nuevo en sintonía de una cadencia mucho más pop alterno que nü metal, subgénero que había destacado a los Cabezones, y a la vez es un trabajo en la lírica bastante personal de cuyo líder. Pero en las letras existen algunos mensajes que se sintetizan en “Jamás”: “soy tu estigma que nunca sacarás” o “por el camino más difícil seguiré” que probablemente ni referencien un momento incierto pero encajan sí con la actualidad.

La guitarra amplificada maneja los tiempos en “Mi reina” y “De la luz” donde los coros se adhieren entre sí y forman una sola voz. Hay una versión power del clásico de Patricio Rey, “Vencedores vencidos” y un acústico homenaje a la amistad con “Raíz”. En “Tiempo”, Andino masculiniza a Amy Lee y a modo de balada se alistan, además, “Él” y “Si pudiera” en la que un piano y una copa de sangre borgoña amagan pese a que termina facturándose un pop más Diego Torres o Lerner que Robert Smith. No puede faltar la vampiresa, un ícono cool de lo dark, que en “Vampira” es la protagonista de una apología sobre la felación. Las cuerdas acompañan la letra de “Dark” que es como un extracto de “La vida de un emo” de Peter Capusotto, (“aazúcar oedullcorantee, qué difícil elecciióon...”). Bajo + riff = “Árboles” integran una producción con mucha más amplitud hacia los escuchas que las anteriores. El cambio de integrantes, o para más precisión, el timonel en manos de César Andino, dieron un vuelco en lo musical, conservando la melancolía en los versos pero ampliando la lectura que puede efectuársele a los sonidos de una banda nueva con el nombre de siempre, por ahora…




pd: pichu, sobalaaaaaaaaa

cesar sigue siendo un grande... y mas sin vos (sabe que tu nombre se coreo insulto tras insulto).



ah! la foto la saque yo (tiemmmmbla machado sicala!!!!)