Esta mañana en el tren venían dos señoras muy paquetas hablando de comida.
Señora paqueta 1: A mis hijos les encantan son las pastas! como sean! Con tuco, con manteca, a veces cuando X viene de jugar al tenis, se hace unos fideos con aceite de oliva, queso y se come hasta la fuente.
Señora paqueta 2: Yo esta noche voy a hacer ravioles de pavita
Señora paqueta1: De pavita? Son secos? Dónde los compras?
Señora paqueta 2: en la fabrica de pastas que esta frente a la estación de Bella Vista.
Señora paqueta 1: Mira vos... son caros?
Señora paqueta 2: no, 9 pesos la caja, y si compras 4 cajas te regalan dos, pero de verdura.
Señora paqueta 1:9 pesos.... 9*4 , 24.... 24 pesos 6 cajas es baratísimo
Señora paqueta 2: Viste y son muy ricos.
Señora paqueta 1: voy a pasar a ver si compro
Juli (a la que le encanta meterse): 9*4 no es 24, es 36.
Señora paqueta 1: 36 cada caja? Ah ...entonces no son tan baratos...
Juli: no señora, las 4 cajas (con una risita burlona)
Señora paqueta 1: claro, no es tan barato, porque antes te daban 6 cajas.
Juli: ahora también
Señora paqueta 1: pero te cobran mas cara la caja, ahí esta la trampa! Viste? Si uno no se da cuenta entra como un caballo.
(ambas se ríen festejando lo vivas que son)
Juli cerro los ojos, respiro hondo y miro para otro lado (definitivamente para tener plata, hay que tener suerte, solo suerte....)